Cada vez que voy a mi dentista y necesito ir con frecuencia debido a los implantes dentales que me están haciendo, salgo con la sensación de ser un vejestorio, de ser un saco de huesos y arrugas a quien nadie quiere mirar, de no servir para nada, de ser culpable de que mis implantes fallen, de exagerar con respecto al sii, de ser una enferma terminal, de ser un despojo humano al que ya sólo le queda retirarse a un lugar lejano para morir con dignidad.
¿Por qué un médico, un profesional de la medicina que se supone debe de ser sensible a nuestro malestar, a nuestra enfermedad, a nuestras carencias, se comporta así?
Soy muy insegura, soy depresiva y ahora, además, tengo el sii. Yo necesito calor humano en el contacto con los médicos.
¿Por qué no nos lo dan? ¿Tanto les molestamos?
No sé si ayer pudo influir que, como el implante era uno que me fracasó y tuvo que volver a hacerme sin cobrar nada, al no haber dinero por medio aún hubo menos sensibilidad.
¡No hay derecho a eso!
¿Por qué la sensibilidad es tan escasa entre los médicos?
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giovanni30
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Isabel Holguin
#3
Los médicos son personas pero también son médicos. Ser médico es su profesión y lo mínimo que se les puede pedir es profesionalidad.
Me he encontrado con médicos que eran excelentes personas y con los que, sin duda, me he sentido muy a gusto.
Yo no pretendo exigir a un médico que sea cariñoso y amable, pero sí profesional. Y esta mujer no tiene ningún derecho a tratarme con esa confianza tan desagradable.
Ella está gordita y a mí no se me ocurre decirle que la primera vez que la vi me recordó a una vaca. Sin embargo ella está constantemente haciendo referencia a mi delgadez. ¿Por qué? ¿Quién le da derecho a una y otra vez decirme que estoy muy delgada?
Sabe de mi trastorno anoréxico, sabe de mi trastorno depresivo y aun así insiste una y otra vez. Y yo, insegura, con la autoestima por los suelos, incapaz de reaccionar a sus palabras, tengo que soportarlo.
Pero estoy pensando en cambiar, si no lo he hecho antes es por cansancio, por pereza de buscar otro dentista y que sea aún peor, pero ya no soporto más.
Porque, además, es una persona muy nerviosa, muy brusca y con un tono de voz altísimo, cualidades que han logrado que le tema al dentista cuando nunca he tenido ningún temor. Y, aun así, ni me muevo en la silla.
Hay profesiones, Giovanni, donde el elemento humano es importante. Yo he dado clases y lo sé. Siempre fui muy querida por mis alumnos porque era muy humana. Sobre todo con los que tenían problemas con la asignatura por incapacidad. Ahora las cosas han cambiado pero cuando daba clase, en la época del BUP y del COU, no sólo me limitaba a dar mi asignatura sino que intentaba que las matemáticas le resultasen lo más sencillas posibles. Me esforzaba en ser mejor profesora y procuraba ser lo más humana posible.
Creo que la humanidad, el afecto, la ternura, son las mejores vías para una comunicación.
Y hay profesiones en las que se necesita comunicación.
Gracias por contestarme y por tu opinión sobre mí.
En la muerte pienso muy a menudo y no sólo por estas cosas, por estos malos encuentros, sino porque estoy cansada, muy cansada de vivir, tengo 51 años y llevo toda la vida luchando y siento que rozo el límite de lo soportable.
La diferencia es que ahora más que en el suicidio pienso sólo en la muerte, desearía acostarme una noche y no despertar, ese es el deseo. Descansar finalmente.
Me he encontrado con médicos que eran excelentes personas y con los que, sin duda, me he sentido muy a gusto.
Yo no pretendo exigir a un médico que sea cariñoso y amable, pero sí profesional. Y esta mujer no tiene ningún derecho a tratarme con esa confianza tan desagradable.
Ella está gordita y a mí no se me ocurre decirle que la primera vez que la vi me recordó a una vaca. Sin embargo ella está constantemente haciendo referencia a mi delgadez. ¿Por qué? ¿Quién le da derecho a una y otra vez decirme que estoy muy delgada?
Sabe de mi trastorno anoréxico, sabe de mi trastorno depresivo y aun así insiste una y otra vez. Y yo, insegura, con la autoestima por los suelos, incapaz de reaccionar a sus palabras, tengo que soportarlo.
Pero estoy pensando en cambiar, si no lo he hecho antes es por cansancio, por pereza de buscar otro dentista y que sea aún peor, pero ya no soporto más.
Porque, además, es una persona muy nerviosa, muy brusca y con un tono de voz altísimo, cualidades que han logrado que le tema al dentista cuando nunca he tenido ningún temor. Y, aun así, ni me muevo en la silla.
Hay profesiones, Giovanni, donde el elemento humano es importante. Yo he dado clases y lo sé. Siempre fui muy querida por mis alumnos porque era muy humana. Sobre todo con los que tenían problemas con la asignatura por incapacidad. Ahora las cosas han cambiado pero cuando daba clase, en la época del BUP y del COU, no sólo me limitaba a dar mi asignatura sino que intentaba que las matemáticas le resultasen lo más sencillas posibles. Me esforzaba en ser mejor profesora y procuraba ser lo más humana posible.
Creo que la humanidad, el afecto, la ternura, son las mejores vías para una comunicación.
Y hay profesiones en las que se necesita comunicación.
Gracias por contestarme y por tu opinión sobre mí.
En la muerte pienso muy a menudo y no sólo por estas cosas, por estos malos encuentros, sino porque estoy cansada, muy cansada de vivir, tengo 51 años y llevo toda la vida luchando y siento que rozo el límite de lo soportable.
La diferencia es que ahora más que en el suicidio pienso sólo en la muerte, desearía acostarme una noche y no despertar, ese es el deseo. Descansar finalmente.
#4
Porfavor Isabel no hagas caso de personas que no merecen ni que las miremos 
Y eso que estas pensando de la muerte, lucha y trata de tener pensamientos positivos, cuando te vengan los pensamientos malos di basta y empieza apensar que eres una persona que tiene que todavia mucho que aportar a los demas y tu vida es muy valiosa
porfavor no vuelvas a hablar asi Isabel que eres una gran persona y con mucha vida por delante y por culpa de una jili....... no vas a desanimarte asi compañera
Te la dedico a ti compañera
Mientras...
MIENTRAS...nazca el perdón tras una ofensa.
Mientras desaparezcan las guerras con diálogos,
y unas manos encuentren ayuda
en otras manos extrañas...habrá esperanza.
MIENTRAS...manos pintadas en blanco
se alcen en señal de protesta.
Mientras se grite "NO" a las drogas,
y se disfrute de la vida con los
sentidos despiertos...habrá esperanza.
MIENTRAS...se valore a la persona
por encima de sus posesiones.
Mientras se reconozca la diferencia entre amor y sexo,
y viva la amistad...habrá esperanza.
MIENTRAS...surja un piropo.
mientras se sonroje una mujer,
y sonría un hombre...habrá esperanza.
MIENTRAS...los besos de un niño
tengan sabor a "gloria".
Mientras la alegría en una mirada se refleje,
y existan los sueños...habrá esperanza.
MIENTRAS ...brote vida en las entrañas.
Mientras se entregue la vida a cambio de otra,
y la libertad se respete...habrá esperanza.
MIENTRAS...exista un hombro donde apoyarse.
Mientras se escriba un "te quiero",
y sean eternos los besos...habrá esperanza.
MIENTRAS...rían los niños.
Mientras no nos corten la luz,
y tú SONRIAS...habrá esperanza.
Y eso que estas pensando de la muerte, lucha y trata de tener pensamientos positivos, cuando te vengan los pensamientos malos di basta y empieza apensar que eres una persona que tiene que todavia mucho que aportar a los demas y tu vida es muy valiosa
porfavor no vuelvas a hablar asi Isabel que eres una gran persona y con mucha vida por delante y por culpa de una jili....... no vas a desanimarte asi compañera
Te la dedico a ti compañera
Mientras...
MIENTRAS...nazca el perdón tras una ofensa.
Mientras desaparezcan las guerras con diálogos,
y unas manos encuentren ayuda
en otras manos extrañas...habrá esperanza.
MIENTRAS...manos pintadas en blanco
se alcen en señal de protesta.
Mientras se grite "NO" a las drogas,
y se disfrute de la vida con los
sentidos despiertos...habrá esperanza.
MIENTRAS...se valore a la persona
por encima de sus posesiones.
Mientras se reconozca la diferencia entre amor y sexo,
y viva la amistad...habrá esperanza.
MIENTRAS...surja un piropo.
mientras se sonroje una mujer,
y sonría un hombre...habrá esperanza.
MIENTRAS...los besos de un niño
tengan sabor a "gloria".
Mientras la alegría en una mirada se refleje,
y existan los sueños...habrá esperanza.
MIENTRAS ...brote vida en las entrañas.
Mientras se entregue la vida a cambio de otra,
y la libertad se respete...habrá esperanza.
MIENTRAS...exista un hombro donde apoyarse.
Mientras se escriba un "te quiero",
y sean eternos los besos...habrá esperanza.
MIENTRAS...rían los niños.
Mientras no nos corten la luz,
y tú SONRIAS...habrá esperanza.
#5
Isabel me he sentido tristemente identificada contigo cuando dices que piensas en la muerte y te gustaría acostarte un día y simplemente no despertar. Lo pienso a menudo y mira que es triste estar cansada de vivir con 27 años.
Lo que pienso en esos momentos es que la esperanza es lo último que se pierde y que merece la pena estar en esta vida si no ya por mí, por la gente que me quiere y a la que quiero. La vida es un regalo, tenemos que aprobecharla y piensa que no hay mal que cien años dure, eso tenlo por seguro.
Anímate, es normal que tengas esos bajones por culpa de la depresión. Bueno, si cualquier persona sana tiene bajones imagínate nosotras según estamos. Eres hipersensible y por eso dejas que una estúpida como tu dentista te amargue el día pues no le hagas ni puñetero caso, a ver si lo que tiene es envidia porque ella no es capaz de bajar sus kilos. Yo también he visto tus fotos y para nada tienes cara de enferma y no te lo diría si no lo pensara de verdad. Mucho ánimo y piensa que mañana será otro día, que mañana también el sol brillará.
(Cambia de dentista y sonrie con esa boca tan bonita que te van a dejar
)
Lo que pienso en esos momentos es que la esperanza es lo último que se pierde y que merece la pena estar en esta vida si no ya por mí, por la gente que me quiere y a la que quiero. La vida es un regalo, tenemos que aprobecharla y piensa que no hay mal que cien años dure, eso tenlo por seguro.
Anímate, es normal que tengas esos bajones por culpa de la depresión. Bueno, si cualquier persona sana tiene bajones imagínate nosotras según estamos. Eres hipersensible y por eso dejas que una estúpida como tu dentista te amargue el día pues no le hagas ni puñetero caso, a ver si lo que tiene es envidia porque ella no es capaz de bajar sus kilos. Yo también he visto tus fotos y para nada tienes cara de enferma y no te lo diría si no lo pensara de verdad. Mucho ánimo y piensa que mañana será otro día, que mañana también el sol brillará.
(Cambia de dentista y sonrie con esa boca tan bonita que te van a dejar
)-
Isabel Holguin
#6
Muchas gracias a las dos.
Ana: Sí que es tremendo que a los 27 años sientas a veces el deseo de no despertar.
Desde que entré en el foro me siento particularmene próxima a todas las personas jóvenes que padecéis la enfermedad.
Yo estoy cada día más convencida de que la enfermedad ha estado conmigo desde hace muchos años pero que no se presentó con la violencia de ahora. Tal vez porque, debido a la anorexia, no comía nada o lo vomitaba y eso evitaba que tuviese gases, aunque también los tenía a veces.
Pero, incluso con anorexia nerviosa, disfruté de mi juventud, disfruté sin enfermedad de los mejores años, y me da muchísima tristeza cuando leo tus posts, o los de desesperada, o los de tantas personas jóvenes que tenéis ya la vida limitada por esta enfermedad.
Mi decadencia comenzó en el año 1995. Año donde comenzaron mis depresiones y mis bajas laborales. Y la vida me resultó cada día más difícil.
Yo no considero la vida como un regalo sino como una imposición. Soy de la opinión, al menos en mi caso, que fue el egoísmo de mi madre el que me dio la vida. O la propia rutina del matrimonio. Pero no lo considero un regalo sino una imposición. Se me ha obligado a vivir y vivir no me resulta fácil. Es más, cada día me resulta más y más difícil.
Esa dificultad para la vida me ha hecho aislarme y alejarme de la gente. Pero, aun aislada y alejada, siempre tienes contactos quieras o no y compruebo cada día cómo la humanidad está perdiendo -y valga la redundancia- la humanidad.
No sólo es la dentista, es mi propia madre que no entendió, ni entiende, ni entenderá mi depresión y que ahora piensa que estoy estreñida y le doy demasiada importancia a algo que a ella también le sucede, y también alguna amiga que, a pesar de mis explicaciones, no comprende el significado de la palabra crónico.
La carta que estoy escribiendo va por ahí: la falta de sensibilidad por parte de la sociedad hacia esta enfermedad porque no la ven como enfermedad sino como algo que a todos les sucede en alguna ocasión.
Sí, en efecto, soy hipersensible. Creo que es debido a mi inseguridad, a mi baja autoestima, a la educación que me dieron de niña en la que todo era obligación y, por lo tanto, jamás se me premió: ni por unos buenos estudios, ni por nada. Al ser obligación de hija, todo deber era mi deber y nunca estaba bien cumplido.
He luchado durante años para quitarme esa educación de encima pero aún la llevo: es indeleble su señal. ¡Qué bien la graban! ¡A fuego!
Para mi madre, aún me lo dice hoy, el ser una buena madre consiste en alimentarme bien, vestirme, darme educación...
Jamás habla de cariño. Jamás habla de ternura.
Creo que sé por qué dejé de comer. Era una rebeldía contra lo que ella consideraba su mayor obligación.
Y así crecí. Sin cariño, sin ternura, sin una palabra de ánimo, sin decirme jamás que hacía bien algo...
Hoy día, no siento por mi madre ni amor ni odio, me es indiferente. Pero me siento inferior prácticamente a cualquiera. Y curiosamente, me suelo rodear de personas muy válidas.
Mañana el sol brillará pero ya sabes el poema: Y enseguida anochece.
Soy muy racional y sé que el futuro que me aguarda no es precisamente maravilloso. Tampoco creo en la felicidad como un estado. La felicidad es ese instante fugaz y efímero que alguna vez se siente y que te hace casi volar, pero es un instante, un segundo. Por supuesto, son esos instantes los que te hacen continuar. Pero son difíciles de encontrar.
Yo los encuentro a veces con la música. Ayer pasé una tarde triste y Mozart me ayudó con sus cuartetos para cuerda.
Me resulta muy difícil vivir pero sí que encuentro en la vida algunos momentos y algunas personas por las que merece seguir luchando.
Me gusta ayudar en el foro, me hace sentirme útil, me acompaña y me ayuda a soportar la carga del sii que es más dura de lo que pensaba. Más dura que la depresión. Y cuando se unen las dos cargas...
Gracias Ana y Xila por animarme. Sois unas personas excelentes las dos. Y si, de verdad estoy aportando algo a este foro, me parece espléndido porque lo que más me satisface en la vida es dar, mucho más que recibir.
Con el desánimo poco puedo hacer cuando aparece. Sé que es absurdo desanimarme por las palabras de una persona a la que debería no escuchar, ¡ser sorda como el sapito!, pero es que esas personas tienen el poder de hundirme, de dejarme sin habla, de anularme. ¿Por qué?
A lo mejor es que soy una romántica y una utópica pero busco con ansiedad que me quieran. Cuando trato mucho con alguien: un médico, el dependiente de una librería, la encargada de un supermercado..., les tomo cariño y me lo suelen tomar y, de ese modo, todo es más agradable. Comprar es más agradable, conversar con ellos uno de esos días en los que no te apetece estar solo es muy agradable,... la vida es más agradable si a tu alrededor sientes aprecio, ternura, comprensión...
Pero no es así, la gente es agresiva, la gente está a la defensiva como si fueses a atacarla, la gente te ataca...
Yo abandoné Madrid porque no pude soportar esa agresividad continua y constante. Yo no quiero guerras, yo quiero paz. Necesito paz. Necesito calor humano. Necesito cariño.
Creo que es mi mayor carencia y sé que soy muy querida, que tengo pocos, pero muy buenos amigos, que me quieren.
Pero me cuesta sentirme querida, no imagináis lo que me cuesta y eso significa que no estoy acostumbrada a serlo.
Y, del mismo modo, me cuesta sentir que quiero y siempre tengo la sensación de que hago daño, siempre me siento culpable de todo lo que sucede. Sé que rayo la paranoia, pero es así.
Y es que de niña, yo era culpable de todo. Si algo desaparecía en casa, yo era la culpable. Si aprobaba, querían un notable.
Si hacía una tarea en la casa, siempre estaba mal hecha.
Y me he convertido en un ser inseguro, trémulo, angustiado, incapaz de valorarse, con sabor a culpabilidad en la boca por sus actos pasados y presentes...
Os voy a poner uno de mis primeros poemas para que me conozcáis un poquito mejor. Espero no desanimaros.
He perdido el orden de mis días
y me desgarro en el caos de la angustia
rota por todas las orillas
No puedo continuar cayendo en el vacío
si tanto odio aturde mis sentidos
Cierro mi cuerpo
interrumpo mi voz
me desvanezco...
y siento mi delgadez que se desliza hacia la nada
Soy un ser solitario que se extingue
en el abismo de los tiempos
una boca insaciable devorando
todo el dolor que la circunda
La soledad es el consuelo de mi ira
el temblor la opresión de mis costillas
y el silencio que me cae gota a gota
me disuelve y me apaga
¡Cómo hundir los huesos en un sueño
entrelazado en la memoria
si estoy envuelta en un medroso y ordenado torrente
que me fluye alrededor como una ola!
La muerte al límite de mi conocimiento
el inevitable destino cercando mis orígenes
todos los enemigos asaltando mis esquinas
y mi único grito detenido en la saliva
Y a continuación uno de los últimos para que comprobéis que algo profundo no cambia en mí:
Tema con variazioni
Contemplo el mar
Paisaje yermo de interior
es esta disonancia de sirenas
dominical urbana siesta
esta pausa estival
Absorta aspiro
su magnético abismo
Respiro atónita su sima
Si al ceñir su orilla
inundarme pudiera
Cadáveres contemplo
circulando de dos en dos
Son como sombras
Perfiles de ciprés
velas de cementerio
Contemplo el mar
Impasible la procesión
viola su turbio azogue
su torpe urdimbre rasga
Var. 1
Nostalgia azul del tiempo
negro brocal del sueño
¡Quién fuese arena!
Un pequeño
Un minúsculo grano
de arena
mojado por las aguas
arrastrado
por el devorador embate
de su cauce
¡Quién fuera arena!
Si de erguir
la podredumbre
tantos años
marchité
Seca el hedor
la arcilla
de mi océano
ya habite la ciudad
o el refugio albergue
de este mar
asfixiado
por dogales de caucho
Var. 2
Lejos del primer llanto
la inocencia extirpada
hábito de gusanos
vistiéndome
ansío cantar
y los labios:
seto
tapial
guadaña
luchan para abortar
el canto
pues se desangra
se expande
como si embeber
quisiera
la saliva:
viejo cartón
inmóvil
Grito
mas sordo verso
Inexorable hoz
que al poema
estrangulas
¿adónde voy
cuando muda
al clarear
despierto?
Ufana soledad
del corazón exangüe
cuyo denso latir
no cesa de agotarme
Var. 3
Esboza el humilde
poema
un rastro
de violencia
sobre el gélido fósil
de la historia
mientras
tiernos diluvios
bañan
el último rincón
de las palabras
Oxidan la memoria
y traspasan ingenuas
el estrecho umbral
del olvido
Var. 4
Fútil ensayo
el escondite
si amanece puntual
la creación
si funde
su mayúsculo horno
las endebles alas
del alma
si fluyen
con la dócil cera
de Ícaro
sus plumas
Desliza el eclipse
la silueta
Afilo las espinas
me clausuro
Var. 5
¿Quién soy yo
me pregunto?
¿Soy un cadáver más?
¿Soy una sombra?
¿Un espectro?
¿Un fantasma?
Ansío ser un pájaro
Un triste pájaro meñique
posado
sobre el hosco ataúd
de este nocturno
Siglos arrastré el cuerpo
sin avance
Agrietada la piel
los huesos carcomidos
cristal los ojos
las manos pergamino
combó la delgadez
y el líquido dolor
resbaló
por la espalda
El vacío
El hinchado
inagotable
cíclope vacío
Inútil deambular
vómito estéril
y las noches
paréntesis de amnesia
embriaguez
delirio
donde encerrar trastornos
fiebres
epidemias
Var. 6
Aislar el orden
desandar la medida
engullir el hastío
la náusea
la mentira
organizando lustros
alimentando yerbas
ahorcando libros
hasta horadar consciente
el túnel familiar
de la locura
No alivia retornar
la centenaria llaga
ningún ámbito ayuda
nada impulsa mi abulia
Un beso a las dos y espero que mis poemas no os desanimen. Es lo que sale de lo más profundo de mí, es de lo que puedo escribir.
Ana: Sí que es tremendo que a los 27 años sientas a veces el deseo de no despertar.
Desde que entré en el foro me siento particularmene próxima a todas las personas jóvenes que padecéis la enfermedad.
Yo estoy cada día más convencida de que la enfermedad ha estado conmigo desde hace muchos años pero que no se presentó con la violencia de ahora. Tal vez porque, debido a la anorexia, no comía nada o lo vomitaba y eso evitaba que tuviese gases, aunque también los tenía a veces.
Pero, incluso con anorexia nerviosa, disfruté de mi juventud, disfruté sin enfermedad de los mejores años, y me da muchísima tristeza cuando leo tus posts, o los de desesperada, o los de tantas personas jóvenes que tenéis ya la vida limitada por esta enfermedad.
Mi decadencia comenzó en el año 1995. Año donde comenzaron mis depresiones y mis bajas laborales. Y la vida me resultó cada día más difícil.
Yo no considero la vida como un regalo sino como una imposición. Soy de la opinión, al menos en mi caso, que fue el egoísmo de mi madre el que me dio la vida. O la propia rutina del matrimonio. Pero no lo considero un regalo sino una imposición. Se me ha obligado a vivir y vivir no me resulta fácil. Es más, cada día me resulta más y más difícil.
Esa dificultad para la vida me ha hecho aislarme y alejarme de la gente. Pero, aun aislada y alejada, siempre tienes contactos quieras o no y compruebo cada día cómo la humanidad está perdiendo -y valga la redundancia- la humanidad.
No sólo es la dentista, es mi propia madre que no entendió, ni entiende, ni entenderá mi depresión y que ahora piensa que estoy estreñida y le doy demasiada importancia a algo que a ella también le sucede, y también alguna amiga que, a pesar de mis explicaciones, no comprende el significado de la palabra crónico.
La carta que estoy escribiendo va por ahí: la falta de sensibilidad por parte de la sociedad hacia esta enfermedad porque no la ven como enfermedad sino como algo que a todos les sucede en alguna ocasión.
Sí, en efecto, soy hipersensible. Creo que es debido a mi inseguridad, a mi baja autoestima, a la educación que me dieron de niña en la que todo era obligación y, por lo tanto, jamás se me premió: ni por unos buenos estudios, ni por nada. Al ser obligación de hija, todo deber era mi deber y nunca estaba bien cumplido.
He luchado durante años para quitarme esa educación de encima pero aún la llevo: es indeleble su señal. ¡Qué bien la graban! ¡A fuego!
Para mi madre, aún me lo dice hoy, el ser una buena madre consiste en alimentarme bien, vestirme, darme educación...
Jamás habla de cariño. Jamás habla de ternura.
Creo que sé por qué dejé de comer. Era una rebeldía contra lo que ella consideraba su mayor obligación.
Y así crecí. Sin cariño, sin ternura, sin una palabra de ánimo, sin decirme jamás que hacía bien algo...
Hoy día, no siento por mi madre ni amor ni odio, me es indiferente. Pero me siento inferior prácticamente a cualquiera. Y curiosamente, me suelo rodear de personas muy válidas.
Mañana el sol brillará pero ya sabes el poema: Y enseguida anochece.
Soy muy racional y sé que el futuro que me aguarda no es precisamente maravilloso. Tampoco creo en la felicidad como un estado. La felicidad es ese instante fugaz y efímero que alguna vez se siente y que te hace casi volar, pero es un instante, un segundo. Por supuesto, son esos instantes los que te hacen continuar. Pero son difíciles de encontrar.
Yo los encuentro a veces con la música. Ayer pasé una tarde triste y Mozart me ayudó con sus cuartetos para cuerda.
Me resulta muy difícil vivir pero sí que encuentro en la vida algunos momentos y algunas personas por las que merece seguir luchando.
Me gusta ayudar en el foro, me hace sentirme útil, me acompaña y me ayuda a soportar la carga del sii que es más dura de lo que pensaba. Más dura que la depresión. Y cuando se unen las dos cargas...
Gracias Ana y Xila por animarme. Sois unas personas excelentes las dos. Y si, de verdad estoy aportando algo a este foro, me parece espléndido porque lo que más me satisface en la vida es dar, mucho más que recibir.
Con el desánimo poco puedo hacer cuando aparece. Sé que es absurdo desanimarme por las palabras de una persona a la que debería no escuchar, ¡ser sorda como el sapito!, pero es que esas personas tienen el poder de hundirme, de dejarme sin habla, de anularme. ¿Por qué?
A lo mejor es que soy una romántica y una utópica pero busco con ansiedad que me quieran. Cuando trato mucho con alguien: un médico, el dependiente de una librería, la encargada de un supermercado..., les tomo cariño y me lo suelen tomar y, de ese modo, todo es más agradable. Comprar es más agradable, conversar con ellos uno de esos días en los que no te apetece estar solo es muy agradable,... la vida es más agradable si a tu alrededor sientes aprecio, ternura, comprensión...
Pero no es así, la gente es agresiva, la gente está a la defensiva como si fueses a atacarla, la gente te ataca...
Yo abandoné Madrid porque no pude soportar esa agresividad continua y constante. Yo no quiero guerras, yo quiero paz. Necesito paz. Necesito calor humano. Necesito cariño.
Creo que es mi mayor carencia y sé que soy muy querida, que tengo pocos, pero muy buenos amigos, que me quieren.
Pero me cuesta sentirme querida, no imagináis lo que me cuesta y eso significa que no estoy acostumbrada a serlo.
Y, del mismo modo, me cuesta sentir que quiero y siempre tengo la sensación de que hago daño, siempre me siento culpable de todo lo que sucede. Sé que rayo la paranoia, pero es así.
Y es que de niña, yo era culpable de todo. Si algo desaparecía en casa, yo era la culpable. Si aprobaba, querían un notable.
Si hacía una tarea en la casa, siempre estaba mal hecha.
Y me he convertido en un ser inseguro, trémulo, angustiado, incapaz de valorarse, con sabor a culpabilidad en la boca por sus actos pasados y presentes...
Os voy a poner uno de mis primeros poemas para que me conozcáis un poquito mejor. Espero no desanimaros.
He perdido el orden de mis días
y me desgarro en el caos de la angustia
rota por todas las orillas
No puedo continuar cayendo en el vacío
si tanto odio aturde mis sentidos
Cierro mi cuerpo
interrumpo mi voz
me desvanezco...
y siento mi delgadez que se desliza hacia la nada
Soy un ser solitario que se extingue
en el abismo de los tiempos
una boca insaciable devorando
todo el dolor que la circunda
La soledad es el consuelo de mi ira
el temblor la opresión de mis costillas
y el silencio que me cae gota a gota
me disuelve y me apaga
¡Cómo hundir los huesos en un sueño
entrelazado en la memoria
si estoy envuelta en un medroso y ordenado torrente
que me fluye alrededor como una ola!
La muerte al límite de mi conocimiento
el inevitable destino cercando mis orígenes
todos los enemigos asaltando mis esquinas
y mi único grito detenido en la saliva
Y a continuación uno de los últimos para que comprobéis que algo profundo no cambia en mí:
Tema con variazioni
Contemplo el mar
Paisaje yermo de interior
es esta disonancia de sirenas
dominical urbana siesta
esta pausa estival
Absorta aspiro
su magnético abismo
Respiro atónita su sima
Si al ceñir su orilla
inundarme pudiera
Cadáveres contemplo
circulando de dos en dos
Son como sombras
Perfiles de ciprés
velas de cementerio
Contemplo el mar
Impasible la procesión
viola su turbio azogue
su torpe urdimbre rasga
Var. 1
Nostalgia azul del tiempo
negro brocal del sueño
¡Quién fuese arena!
Un pequeño
Un minúsculo grano
de arena
mojado por las aguas
arrastrado
por el devorador embate
de su cauce
¡Quién fuera arena!
Si de erguir
la podredumbre
tantos años
marchité
Seca el hedor
la arcilla
de mi océano
ya habite la ciudad
o el refugio albergue
de este mar
asfixiado
por dogales de caucho
Var. 2
Lejos del primer llanto
la inocencia extirpada
hábito de gusanos
vistiéndome
ansío cantar
y los labios:
seto
tapial
guadaña
luchan para abortar
el canto
pues se desangra
se expande
como si embeber
quisiera
la saliva:
viejo cartón
inmóvil
Grito
mas sordo verso
Inexorable hoz
que al poema
estrangulas
¿adónde voy
cuando muda
al clarear
despierto?
Ufana soledad
del corazón exangüe
cuyo denso latir
no cesa de agotarme
Var. 3
Esboza el humilde
poema
un rastro
de violencia
sobre el gélido fósil
de la historia
mientras
tiernos diluvios
bañan
el último rincón
de las palabras
Oxidan la memoria
y traspasan ingenuas
el estrecho umbral
del olvido
Var. 4
Fútil ensayo
el escondite
si amanece puntual
la creación
si funde
su mayúsculo horno
las endebles alas
del alma
si fluyen
con la dócil cera
de Ícaro
sus plumas
Desliza el eclipse
la silueta
Afilo las espinas
me clausuro
Var. 5
¿Quién soy yo
me pregunto?
¿Soy un cadáver más?
¿Soy una sombra?
¿Un espectro?
¿Un fantasma?
Ansío ser un pájaro
Un triste pájaro meñique
posado
sobre el hosco ataúd
de este nocturno
Siglos arrastré el cuerpo
sin avance
Agrietada la piel
los huesos carcomidos
cristal los ojos
las manos pergamino
combó la delgadez
y el líquido dolor
resbaló
por la espalda
El vacío
El hinchado
inagotable
cíclope vacío
Inútil deambular
vómito estéril
y las noches
paréntesis de amnesia
embriaguez
delirio
donde encerrar trastornos
fiebres
epidemias
Var. 6
Aislar el orden
desandar la medida
engullir el hastío
la náusea
la mentira
organizando lustros
alimentando yerbas
ahorcando libros
hasta horadar consciente
el túnel familiar
de la locura
No alivia retornar
la centenaria llaga
ningún ámbito ayuda
nada impulsa mi abulia
Un beso a las dos y espero que mis poemas no os desanimen. Es lo que sale de lo más profundo de mí, es de lo que puedo escribir.
#7
Isabel se que cuando escribes esas cosas estas muy triste, momentos de esos tenemos todas las personas, lo malo es si esos momentos se hacen demasiados en el dia,pero vaya estoy segurisima que tienes que tener momentos alegres: cuando tu compañero te sonrie, cuando alguien en el foro te agradece su ayuda, cuando un amigo te hace reir etc.................
Porque no escribes en esos momentos felices y expresas los sentimientos buenos de las personas, ya se que hay pocas personas que valgan la pena pero haberlas hailas busca en tu corazon y deja que fluya eso que tanto reclamas ternura, comprension, cariño y veras que poemas tan lindos te salen porfaaaaaaaaaa :D
Muchos besos compañera y piensa que aunque en la distancia, aqui tienes amigos a montones que te quieren y te aprecian muchisimooooooo
Porque no escribes en esos momentos felices y expresas los sentimientos buenos de las personas, ya se que hay pocas personas que valgan la pena pero haberlas hailas
busca en tu corazon y deja que fluya eso que tanto reclamas ternura, comprension, cariño y veras que poemas tan lindos te salen porfaaaaaaaaaa :D Muchos besos compañera y piensa que aunque en la distancia, aqui tienes amigos a montones que te quieren y te aprecian muchisimooooooo
#10
Bueno Isabel es cierto que ninguno elegimos nacer pero yo personalmente si tengo que elegir entre considerar la vida como un regalo o como una imposición, prefiero lo primero. Eres muy negativa, ojala pudiera hacer algo para que vieras la vida de otra manera. Es verdad que es deprimente la poca humanidad que tienen muchas personas pero hay que quedarse con lo bueno, con la flor que crece en la mala hierba. Cuánta gente es buena de corazón y hacen cosas buenas por los demás!Nada más que veas este foro, intentamos ayudarnos lo unos a los otros y aunque realmente entramos aquí buscando ayuda es cierto que al final nos volcamos por los demás y nos resulta realmente gratificante poder ayudarnos los unos a los otros. Considero a eso humanidad. Mira, mil médicos me han tratado fatal e incluso me han hecho a llorar pero yo me quedo con lo bueno, con la médica que hace un mes me vio muy mal anímicamente y llamó a mi psicóloga pidiéndole por favor que me viera cuanto antes porque estaba preocupada por mí. Con eso me quedo.
También es comprensible que veas las cosas de esa manera si no tienes el apoyo de tu madre y si te han educado de esa manera. Tiene que ser muy duro. Si te digo la verdad yo también tuve trastornos alimenticios en mi adolescencia porque pasaban de mí (o esa era la sensación que yo tenía), creían que como decía el médico, era cosa de los nervios. Lo que más me dolía era que mi madre no me creyera y supongo que dejar de comer fue una forma de llamar su atención (afortunadamente no desembocó en una anorexia pero a punto estuvo). Ahora que me han operado de las adherencias y que el cirujano les ha dejado clarito a mis padres es suplicio que he pasado (y lo que me queda), he respirado hondo y me he dado cuenta de lo necesario que es en esta vida el apoyo de los nuestros. Ahora lo tengo y fíjate, por las adherencias pues seguro que si siguiera sólo con el SII las cosas habrían seguido igual.
Eres hipersensible al igual que la mayoría de los que formamos parte de este foro, por lo que he podido obserbar. Yo pienso que no es la causa de nuestra enfermedad pero sí es un añadido, digamos una característica nuestra. No guardes rencor por la educación que recibiste que el rencor es muy malo y te dañará a ti misma. Antes yo también guardaba mucho rencor contra mi familia, pensaba que si ellos me hubieran educado de otra manera no habría desarrollado SII. Pero entonces me paré a pensar en que tengo otros 2 hermanos educados de la misma manera y que ellos no tienen ningún problema de tripa ni de salud. Así me he dado cuenta de que el rencor es el peor enemigo de uno mismo. Mis padres lo hicieron lo mejor que pudieron y supieron y oye, han cometido muchos fallos es verdad y no lo habría pasado tan mal de no ser así pero no puedo culparlos. Ellos me quieren y quieren lo mejor para mí. Bueno lo del rencor creo que no lo decías por tu familia, no?no sé pero vamos, en tus poemas sí aparece la palabra rencor.
Estoy de acuerdo contigo en que la felicidad no es un estado, la felicidad la hacen las pequeñas cosas de la vida y tenemos que hacer lo posible por disfrutar de éstas, sólo entonces seremos felices. Y es verdad, amanece igual que anochece pero recuerda que la oscuridad no es otra cosa que ausencia de luz; si nunca anocheciera no valoraríamos el día para nada.
Créeme si te digo que sí aportas mucho al foro. Tienes mu mala leche y eres cabezona como tú sola pero bueno oye, cada uno tenemos nuestras cosas jijijij no te enfades por llamarte cabezona pero es verdad los tienes cuadraos a veces pero eres buena persona y eso se ve. Están bien hasta esas discusiones que tienes de vez en cuando, así sacáis la adrenalina que también viene bien de vez en cuando.
Es cierto que eres muy racional y si me permites mi humilde opinión es bueno serlo a veces pero también hay que tener ilusión por las cosas, también es bueno soñar (eso sí hay que saber elegir cuándo ser cada cosa, que es lo difícil).
En cuanto a las personas como tu dentista que tienen el poder de anularte creo que ese poder no lo tienen ellas, es por tu baja autoestima o al menos a mí me pasa eso. Has oído decir alguna vez que no ofende quién quiere sino quién puede? Pues a nosotros que somos hipersensibles y encima estamos megasensibles de la muerte (o sea ), pues somos un blanco fácil para la gente que se crece hundiendo a los demás. Y lo jodido es que son como perros, huelen el miedo. Me siento identificada contigo, me afecta demasiado lo que me digan pero me he propuesto luchar contra eso, endurecerme, porque yo no soy menos que nadie ni más tampoco así que nadie tiene derecho a mirarme por encima del hombro y a disfrutar viendo como sus palabras me hunden. Estoy en ello ,eh?aún no lo he conseguido pero sí es cierto que poco a poco voy viendo resultados.
Isabel tú te quieres a ti misma? Lo digo porque es difícil querer a los demás si no nos queremos a nosotros mismos. En eso también estoy, en quererme un poquito, de pequeña me quería pero llegaron los problemas y bueno, ahora me está costando. Pero sigo con mi lucha interior y cada vez me quiero más aunque sea poquito a poco al final obtendré resultados. Casi me cargo mi relación con mi novio porque me quería tan poco a mí misma que no me cabía en la cabeza que él pudiera quererme pero me quiere y mucho y como él es un tío fabuloso si me quiere es porque valgo mucho, no hay otra explicación así que ahora a metérmelo en la cabeza.
Sé que es difícil dejar atrás tu pasado pero puedes intentarlo (me refiero a lo malo, no lo bueno claro). Me he dado cuenta de que muchas veces en los post que contestas estás muy a la defensiva, supongo que es lo que te han enseñado pues si nunca te han valorado... Pero ahora ya no es así, ahora estás rodeada de gente que te quiere y te valora. Yo soy una de esas personas y si preguntas a los compis foreros te llevarás una sorpresa porque hasta la gente con la que has discutido te considera una gran persona (con mala folla eso sí, pero una gran tía )
En fin vaya rollo te he metido. Este es post más largo que he escrito desde que entré en el foro espero que sirva de algo aunque sólo sea un poquito. A mí también me ha ayudado escribirlo no creas, a veces tenemos cosas en la cabeza pero hasta que no las escribimos no somos realmente conscientes de ellas.
(Espero que hayas llegado hasta aquí sin dormirte, )
También es comprensible que veas las cosas de esa manera si no tienes el apoyo de tu madre y si te han educado de esa manera. Tiene que ser muy duro. Si te digo la verdad yo también tuve trastornos alimenticios en mi adolescencia porque pasaban de mí (o esa era la sensación que yo tenía), creían que como decía el médico, era cosa de los nervios. Lo que más me dolía era que mi madre no me creyera y supongo que dejar de comer fue una forma de llamar su atención (afortunadamente no desembocó en una anorexia pero a punto estuvo). Ahora que me han operado de las adherencias y que el cirujano les ha dejado clarito a mis padres es suplicio que he pasado (y lo que me queda), he respirado hondo y me he dado cuenta de lo necesario que es en esta vida el apoyo de los nuestros. Ahora lo tengo y fíjate, por las adherencias pues seguro que si siguiera sólo con el SII las cosas habrían seguido igual.
Eres hipersensible al igual que la mayoría de los que formamos parte de este foro, por lo que he podido obserbar. Yo pienso que no es la causa de nuestra enfermedad pero sí es un añadido, digamos una característica nuestra. No guardes rencor por la educación que recibiste que el rencor es muy malo y te dañará a ti misma. Antes yo también guardaba mucho rencor contra mi familia, pensaba que si ellos me hubieran educado de otra manera no habría desarrollado SII. Pero entonces me paré a pensar en que tengo otros 2 hermanos educados de la misma manera y que ellos no tienen ningún problema de tripa ni de salud. Así me he dado cuenta de que el rencor es el peor enemigo de uno mismo. Mis padres lo hicieron lo mejor que pudieron y supieron y oye, han cometido muchos fallos es verdad y no lo habría pasado tan mal de no ser así pero no puedo culparlos. Ellos me quieren y quieren lo mejor para mí. Bueno lo del rencor creo que no lo decías por tu familia, no?no sé pero vamos, en tus poemas sí aparece la palabra rencor.
Estoy de acuerdo contigo en que la felicidad no es un estado, la felicidad la hacen las pequeñas cosas de la vida y tenemos que hacer lo posible por disfrutar de éstas, sólo entonces seremos felices. Y es verdad, amanece igual que anochece pero recuerda que la oscuridad no es otra cosa que ausencia de luz; si nunca anocheciera no valoraríamos el día para nada.
Créeme si te digo que sí aportas mucho al foro. Tienes mu mala leche y eres cabezona como tú sola pero bueno oye, cada uno tenemos nuestras cosas jijijij no te enfades por llamarte cabezona pero es verdad los tienes cuadraos a veces pero eres buena persona y eso se ve. Están bien hasta esas discusiones que tienes de vez en cuando, así sacáis la adrenalina que también viene bien de vez en cuando.
Es cierto que eres muy racional y si me permites mi humilde opinión es bueno serlo a veces pero también hay que tener ilusión por las cosas, también es bueno soñar (eso sí hay que saber elegir cuándo ser cada cosa, que es lo difícil).
En cuanto a las personas como tu dentista que tienen el poder de anularte creo que ese poder no lo tienen ellas, es por tu baja autoestima o al menos a mí me pasa eso. Has oído decir alguna vez que no ofende quién quiere sino quién puede? Pues a nosotros que somos hipersensibles y encima estamos megasensibles de la muerte (o sea
), pues somos un blanco fácil para la gente que se crece hundiendo a los demás. Y lo jodido es que son como perros, huelen el miedo. Me siento identificada contigo, me afecta demasiado lo que me digan pero me he propuesto luchar contra eso, endurecerme, porque yo no soy menos que nadie ni más tampoco así que nadie tiene derecho a mirarme por encima del hombro y a disfrutar viendo como sus palabras me hunden. Estoy en ello ,eh?aún no lo he conseguido pero sí es cierto que poco a poco voy viendo resultados.Isabel tú te quieres a ti misma? Lo digo porque es difícil querer a los demás si no nos queremos a nosotros mismos. En eso también estoy, en quererme un poquito, de pequeña me quería pero llegaron los problemas y bueno, ahora me está costando. Pero sigo con mi lucha interior y cada vez me quiero más aunque sea poquito a poco al final obtendré resultados. Casi me cargo mi relación con mi novio porque me quería tan poco a mí misma que no me cabía en la cabeza que él pudiera quererme pero me quiere y mucho y como él es un tío fabuloso si me quiere es porque valgo mucho, no hay otra explicación así que ahora a metérmelo en la cabeza.
Sé que es difícil dejar atrás tu pasado pero puedes intentarlo (me refiero a lo malo, no lo bueno claro). Me he dado cuenta de que muchas veces en los post que contestas estás muy a la defensiva, supongo que es lo que te han enseñado pues si nunca te han valorado... Pero ahora ya no es así, ahora estás rodeada de gente que te quiere y te valora. Yo soy una de esas personas y si preguntas a los compis foreros te llevarás una sorpresa porque hasta la gente con la que has discutido te considera una gran persona (con mala folla eso sí, pero una gran tía
)En fin vaya rollo te he metido. Este es post más largo que he escrito desde que entré en el foro espero que sirva de algo aunque sólo sea un poquito. A mí también me ha ayudado escribirlo no creas, a veces tenemos cosas en la cabeza pero hasta que no las escribimos no somos realmente conscientes de ellas.
(Espero que hayas llegado hasta aquí sin dormirte,
)-
Isabel Holguin
#11
He llegado hasta el final y me he sorprendido.
Yo no tengo mala leche en absoluto y no soy cabezona. En eso creo que estás equivocada completamente.
Si fuese cabezona no me retiraría de algunas discusiones en las que sé, porque lo he preguntado, que mi opinión era la válida. Sin embargo, me he quedado con mi opinión y dejo que los demás, si quieren, contrasten las opiniones.
Y mala leche, ninguna en absoluto. Mi rabia, que a veces siento, dura lo que dura un suspiro. Porque es algo instintivo. Soy impulsiva a veces pero no creo haberlo sido en el foro más que una vez y ya le pedí disculpas a la persona afectada.
Anna, en muchas cosas has acertado pero no en esas dos.
Te diré lo que opino de mí misma: por supuesto que no me quiero lo suficiente; es posible que no me quiera apenas nada; sin embargo creo que sí sé querer, al menos las personas más próximas a mí se sienten muy queridas y me lo dicen.
Porque me considero muy generosa. Y en este foro me lo estoy demostrando a mí misma pues te diré que no coincido con muchas de las ideas y de lo que leo y jamás, jamás, las he criticado ni he dicho nada acerca de ellas porque no quiero hacer daño a personas que sufren. Porque estoy en el foro debido a que me une algo a todos vosotros y es el sii.
No me valoro nada. Necesito demasiado de la valoración de los demás y eso lo considero un defecto pues cuando siento o percibo la falta de valoración o cuando me critican me duele demasiado.
Intento luchar contra esto pero es difícil. Lo he logrado con mi familia, ya no busco su valoración pues es difícil valorar algo que ellos no valoran y mis valores, mis aficiones, mis pasiones, son tan diferentes a las de ellos que es imposible que las valoren.
También te equivocas en el rencor. Yo ya no guardo rencor a mi madre. Precisamente todo lo que escribí contra ella me permitió sacar de mi interior no ya el rencor sino el odio que sentía hacia ella. Ahora me es indiferente. No puedo decir que la quiero porque no la quiero. Para mí querer es una palabra importante, quiero a muy pocas personas.
Soy pesismista porque no me gusta el mundo. Nunca me gustó pero, cuando eres joven, te pones una venda en los ojos para no ver y así simular que te gusta. Pero nunca me gustó y cada día me gusta menos.
Eso no quiere decir que no valore a muchas personas y que no disfrute de momentos especiales.
Eso sí, cada vez menos.
Desde que estoy con el sii mi vida ha sufrido un giro de 180º, no soy la misma; no consigo ilusionarme por las pequeñas cosas como lo conseguía antes. Me cuesta concentrarme en mis libros que son mi vida. Me cuesta mucho alcanzar ese estado de semi-euforia que lograba antes cuando leía y me encontraba identificada con lo que estaba leyendo.
En cuanto a los sueños, el único sueño que ahora tengo es que den con la causa de esta enfermedad y pueda volver a mi pequeña rutina.
Soy hipersensible, demasiado quizás, porque hay palabras y gestos que debería obviar, incluso despreciar como me dice mi buena amiga Ana que haga, pero no soy capaz porque el dolor es tan grande que me anula.
Tengo 51 años y llevo luchando contra mi educación muchísimos años. Desde los 17 años me rebelé. La anorexia nerviosa puede considerarse un gesto de rebeldía. Pero hay muchos más: nunca quise ser como eran los que tenía próximos. Nunca quise ser hipócrita como lo era mi madre o mi hermana que sonreían por delante y ponían mala cara por detrás en muchas ocasiones. Nunca quise que mis valores fueran los suyos: ganar dinero; tener posesiones; ser poderosos; estar por encima de los demás; llevar razón siempre;
Mis valores son otros: la curiosidad por el conocimiento; la belleza de las palabras y de la música; el lograr un instante de éxtasis que anule las horas de dolor; ser sencillamente bueno...
También yo tuve problemas en la relación con mi pareja. Pero es que comencé a vivir con él cuando yo tenía cuarenta años y llevaba tiempo viviendo sola. Fue difícil y aún lo es algunas veces. Pero él soportó hasta lo insoportable porque sabía que en el fondo deseaba permanecer con él.
Mi pasado está atrás. Pero no puedo olvidar lo que está grabado a fuego en mi memoria. Además no me parece nada malo que esté ahí. Me sirve para avanzar, me sirve para saber lo que no quiero ser, me sirve para seguir mi camino, el camino que he elegido seguir.
Que estoy a la defensiva, ¡puede ser! Porque tengo miedo a que me hagan daño. Algunas veces no respondo a los posts porque tengo miedo a que alguien me diga algo que me duela. Ya me ha pasado y quiero evitar que me vuelva a pasar.
Tú no me has hecho daño pero, de algún modo me duele que opines que tengo mala leche porque no la tengo en absoluto.
Soy impulsiva y algunas veces he hecho daño a alguna persona debido a ese impulso, pero el dolor que he sentido después ha sido mayor que el causado. Porque cada vez que hago daño soy consciente de ese daño y me siento tan mal que hasta que no alivio un poco ese mal no me detengo. Y aun cuando lo alivio, continúa por dentro la sensación desagradable de no gustarme ser así, de no gustarme nada ser así.
Entrar en el foro ha sido toda una proeza para mí porque hace tres años decidí vivir aislada y solitaria debido a mis problemas para relacionarme. Y de pronto me veo discutiendo cuando no quiero discutir por nada, ni siquiera por aquello en lo que creo tengo razón.
Querida Ana: no has sabido conocerme. Claro que es difícil conocer a alguien por lo que escribe.
Jamás, ni siquiera cuando he discutido más apasionadamente, ha salido de mi pensamiento una sola gota de mala leche. No. Jamás. Si la tuviese, hubiese escrito cosas muy diferentes. Pero no la tengo y eso me hace respetar a todos los de este foro, a todos, incluso a personas con las que no tengo nada, nada en común.
Pero jamás he dicho nada que pudiera causarles dolor. Y en la carta lo he demostrado. No he hecho referencia en ningún momento a todo aquello en lo que soy escéptica porque estaba escribiendo en nombre de todos y me puse en su lugar.
Sé que soy buena persona, junto con mi sensibilidad es lo que valoro de mí.
Resumiendo: no tengo mala leche; no soy cabezona pues sé retirarme y lo he demostrado; no soy rencorosa ni con mi familia ni con nadie; mi rabia, cuando la tengo, dura un instante; soy generosa; soy buena persona; creo que sé querer a pesar de no quererme mucho; soy hipersensible a cualquier crítica; se me hace daño fácilmente; me da miedo la relación humana por ese daño fácil que percibo; no me siento superior a nadie, simplemente diferente a muchos; mi visión de la vida no cambiará porque no puedo ser optimista ante una civilización que, a mi manera de ver, se está autodestruyendo; no creo en ningún dios; soy profundamente atea; siento una inmensa tristeza cuando veo los telediarios y compruebo cada día la injusticia de los que formamos el primer mundo; amo la música clásica y la poesía por encima de todo quizás por su capacidad de abstracción que logra que me evada de todo y de todos durante algún tiempo; escribo desde hace mucho porque me gusta expresar lo que siento, lo que he sentido, pero sí soy consciente de lo que hay en mi interior, y cuando lo saco es porque no quiero que permanezca dentro, pero siempre me distancio al sacarlo; no se puede se objetivo si no hay distancia suficiente;
Soy racional y me gusta serlo. Quizás ese fue el motivo de estudiar Matemáticas. ¡La única ciencia exacta!
En el caos tan inmenso que es la vida, porque el universo es caos, porque todo es caos, preciso de un poco de orden y por eso soy tan ordenada y tan metódica porque necesito agarrarme a algo sólido para no perder el equilibrio a cada instante.
No soy fuerte y, sin embargo, mi voluntad es de hierro. He superado una anorexia nerviosa, una bulimia nerviosa y lucho contra una depresión crónica cada día. Ahora, además, lucho contra una enfermedad que ha entrado en mi vida cuando ya pensaba que había encontrado la calma necesaria, la tranquilidad tan ansiada, la paz tan deseada.
De lucha sé mucho porque cada día, para mí, es una lucha. Lucho contra el deseo más profundo de mí misma. Lucho contra el deseo de morir y lo demuestro viviendo.
Y hay cosas, querida Ana, que no deseo cambiar. Me gusta la tristeza porque encuentro en ella más belleza que en muchas alegrías. Y si das un repaso a la filosofía el tema de "Lo triste y lo bello" está en boca de muchos filósofos.
Pero no lo considero nada perjudicial, disfruto de lo triste, ¡ojo, no del dolor!, sólo de lo triste.
Me gusta Kafka, me gusta Camus, me gusta Cernuda, me gusta Dostoievsky, me gusta Beethoven, me gusta Virginia Woolf..., personajes tristes, personajes con los que me identifico y que le dan a mi vida un sentido que es sólo mío y que necesito para vivir.
Bueno, te contaría mucho más pero creo que, por el momento, es suficiente.
Y nada de "mala leche", ¿de acuerdo? No me ha dolido mucho pero sí un poquito porque no soy así. Y hasta me parece asombroso que haya dado esa impresión pues soy consciente de cómo y cuándo se puede hacer daño y jamás he usado esas armas.
Si ni siquiera las uso con aquellos que me hacen daño notoriamente.
Ana, gracias por tus palabras y espero que, de ahora en adelante, me conozcas un poco mejor.
Yo no tengo mala leche en absoluto y no soy cabezona. En eso creo que estás equivocada completamente.
Si fuese cabezona no me retiraría de algunas discusiones en las que sé, porque lo he preguntado, que mi opinión era la válida. Sin embargo, me he quedado con mi opinión y dejo que los demás, si quieren, contrasten las opiniones.
Y mala leche, ninguna en absoluto. Mi rabia, que a veces siento, dura lo que dura un suspiro. Porque es algo instintivo. Soy impulsiva a veces pero no creo haberlo sido en el foro más que una vez y ya le pedí disculpas a la persona afectada.
Anna, en muchas cosas has acertado pero no en esas dos.
Te diré lo que opino de mí misma: por supuesto que no me quiero lo suficiente; es posible que no me quiera apenas nada; sin embargo creo que sí sé querer, al menos las personas más próximas a mí se sienten muy queridas y me lo dicen.
Porque me considero muy generosa. Y en este foro me lo estoy demostrando a mí misma pues te diré que no coincido con muchas de las ideas y de lo que leo y jamás, jamás, las he criticado ni he dicho nada acerca de ellas porque no quiero hacer daño a personas que sufren. Porque estoy en el foro debido a que me une algo a todos vosotros y es el sii.
No me valoro nada. Necesito demasiado de la valoración de los demás y eso lo considero un defecto pues cuando siento o percibo la falta de valoración o cuando me critican me duele demasiado.
Intento luchar contra esto pero es difícil. Lo he logrado con mi familia, ya no busco su valoración pues es difícil valorar algo que ellos no valoran y mis valores, mis aficiones, mis pasiones, son tan diferentes a las de ellos que es imposible que las valoren.
También te equivocas en el rencor. Yo ya no guardo rencor a mi madre. Precisamente todo lo que escribí contra ella me permitió sacar de mi interior no ya el rencor sino el odio que sentía hacia ella. Ahora me es indiferente. No puedo decir que la quiero porque no la quiero. Para mí querer es una palabra importante, quiero a muy pocas personas.
Soy pesismista porque no me gusta el mundo. Nunca me gustó pero, cuando eres joven, te pones una venda en los ojos para no ver y así simular que te gusta. Pero nunca me gustó y cada día me gusta menos.
Eso no quiere decir que no valore a muchas personas y que no disfrute de momentos especiales.
Eso sí, cada vez menos.
Desde que estoy con el sii mi vida ha sufrido un giro de 180º, no soy la misma; no consigo ilusionarme por las pequeñas cosas como lo conseguía antes. Me cuesta concentrarme en mis libros que son mi vida. Me cuesta mucho alcanzar ese estado de semi-euforia que lograba antes cuando leía y me encontraba identificada con lo que estaba leyendo.
En cuanto a los sueños, el único sueño que ahora tengo es que den con la causa de esta enfermedad y pueda volver a mi pequeña rutina.
Soy hipersensible, demasiado quizás, porque hay palabras y gestos que debería obviar, incluso despreciar como me dice mi buena amiga Ana que haga, pero no soy capaz porque el dolor es tan grande que me anula.
Tengo 51 años y llevo luchando contra mi educación muchísimos años. Desde los 17 años me rebelé. La anorexia nerviosa puede considerarse un gesto de rebeldía. Pero hay muchos más: nunca quise ser como eran los que tenía próximos. Nunca quise ser hipócrita como lo era mi madre o mi hermana que sonreían por delante y ponían mala cara por detrás en muchas ocasiones. Nunca quise que mis valores fueran los suyos: ganar dinero; tener posesiones; ser poderosos; estar por encima de los demás; llevar razón siempre;
Mis valores son otros: la curiosidad por el conocimiento; la belleza de las palabras y de la música; el lograr un instante de éxtasis que anule las horas de dolor; ser sencillamente bueno...
También yo tuve problemas en la relación con mi pareja. Pero es que comencé a vivir con él cuando yo tenía cuarenta años y llevaba tiempo viviendo sola. Fue difícil y aún lo es algunas veces. Pero él soportó hasta lo insoportable porque sabía que en el fondo deseaba permanecer con él.
Mi pasado está atrás. Pero no puedo olvidar lo que está grabado a fuego en mi memoria. Además no me parece nada malo que esté ahí. Me sirve para avanzar, me sirve para saber lo que no quiero ser, me sirve para seguir mi camino, el camino que he elegido seguir.
Que estoy a la defensiva, ¡puede ser! Porque tengo miedo a que me hagan daño. Algunas veces no respondo a los posts porque tengo miedo a que alguien me diga algo que me duela. Ya me ha pasado y quiero evitar que me vuelva a pasar.
Tú no me has hecho daño pero, de algún modo me duele que opines que tengo mala leche porque no la tengo en absoluto.
Soy impulsiva y algunas veces he hecho daño a alguna persona debido a ese impulso, pero el dolor que he sentido después ha sido mayor que el causado. Porque cada vez que hago daño soy consciente de ese daño y me siento tan mal que hasta que no alivio un poco ese mal no me detengo. Y aun cuando lo alivio, continúa por dentro la sensación desagradable de no gustarme ser así, de no gustarme nada ser así.
Entrar en el foro ha sido toda una proeza para mí porque hace tres años decidí vivir aislada y solitaria debido a mis problemas para relacionarme. Y de pronto me veo discutiendo cuando no quiero discutir por nada, ni siquiera por aquello en lo que creo tengo razón.
Querida Ana: no has sabido conocerme. Claro que es difícil conocer a alguien por lo que escribe.
Jamás, ni siquiera cuando he discutido más apasionadamente, ha salido de mi pensamiento una sola gota de mala leche. No. Jamás. Si la tuviese, hubiese escrito cosas muy diferentes. Pero no la tengo y eso me hace respetar a todos los de este foro, a todos, incluso a personas con las que no tengo nada, nada en común.
Pero jamás he dicho nada que pudiera causarles dolor. Y en la carta lo he demostrado. No he hecho referencia en ningún momento a todo aquello en lo que soy escéptica porque estaba escribiendo en nombre de todos y me puse en su lugar.
Sé que soy buena persona, junto con mi sensibilidad es lo que valoro de mí.
Resumiendo: no tengo mala leche; no soy cabezona pues sé retirarme y lo he demostrado; no soy rencorosa ni con mi familia ni con nadie; mi rabia, cuando la tengo, dura un instante; soy generosa; soy buena persona; creo que sé querer a pesar de no quererme mucho; soy hipersensible a cualquier crítica; se me hace daño fácilmente; me da miedo la relación humana por ese daño fácil que percibo; no me siento superior a nadie, simplemente diferente a muchos; mi visión de la vida no cambiará porque no puedo ser optimista ante una civilización que, a mi manera de ver, se está autodestruyendo; no creo en ningún dios; soy profundamente atea; siento una inmensa tristeza cuando veo los telediarios y compruebo cada día la injusticia de los que formamos el primer mundo; amo la música clásica y la poesía por encima de todo quizás por su capacidad de abstracción que logra que me evada de todo y de todos durante algún tiempo; escribo desde hace mucho porque me gusta expresar lo que siento, lo que he sentido, pero sí soy consciente de lo que hay en mi interior, y cuando lo saco es porque no quiero que permanezca dentro, pero siempre me distancio al sacarlo; no se puede se objetivo si no hay distancia suficiente;
Soy racional y me gusta serlo. Quizás ese fue el motivo de estudiar Matemáticas. ¡La única ciencia exacta!
En el caos tan inmenso que es la vida, porque el universo es caos, porque todo es caos, preciso de un poco de orden y por eso soy tan ordenada y tan metódica porque necesito agarrarme a algo sólido para no perder el equilibrio a cada instante.
No soy fuerte y, sin embargo, mi voluntad es de hierro. He superado una anorexia nerviosa, una bulimia nerviosa y lucho contra una depresión crónica cada día. Ahora, además, lucho contra una enfermedad que ha entrado en mi vida cuando ya pensaba que había encontrado la calma necesaria, la tranquilidad tan ansiada, la paz tan deseada.
De lucha sé mucho porque cada día, para mí, es una lucha. Lucho contra el deseo más profundo de mí misma. Lucho contra el deseo de morir y lo demuestro viviendo.
Y hay cosas, querida Ana, que no deseo cambiar. Me gusta la tristeza porque encuentro en ella más belleza que en muchas alegrías. Y si das un repaso a la filosofía el tema de "Lo triste y lo bello" está en boca de muchos filósofos.
Pero no lo considero nada perjudicial, disfruto de lo triste, ¡ojo, no del dolor!, sólo de lo triste.
Me gusta Kafka, me gusta Camus, me gusta Cernuda, me gusta Dostoievsky, me gusta Beethoven, me gusta Virginia Woolf..., personajes tristes, personajes con los que me identifico y que le dan a mi vida un sentido que es sólo mío y que necesito para vivir.
Bueno, te contaría mucho más pero creo que, por el momento, es suficiente.
Y nada de "mala leche", ¿de acuerdo? No me ha dolido mucho pero sí un poquito porque no soy así. Y hasta me parece asombroso que haya dado esa impresión pues soy consciente de cómo y cuándo se puede hacer daño y jamás he usado esas armas.
Si ni siquiera las uso con aquellos que me hacen daño notoriamente.
Ana, gracias por tus palabras y espero que, de ahora en adelante, me conozcas un poco mejor.
-
sorgintxu23
- Usuario Veterano
- Mensajes: 518
- Registrado: Jue Nov 30, 2006 2:49 pm
#13
Creo que tanto el tono, como tus palabras estaban muy bien dichas. Hay veces que no hace daño el contenido sino la forma, cuando gritamos,a veces nos sulfuramos,...Pero qué va! en mi opinión has sido respetuosa y has dicho todo de corazón, a mi ya me gustaria que mucha gente expresara asi sus sentimientos 
no sé que opinareis los demás
no sé que opinareis los demás
#14
para mi lo has expresado super bien,yo creo que mejor no puede estar,se nota educacion y cariño.
yo soy cabezona y cuando discuto con algun amig@ siempre me dicen,joder que cabezona, siempre igual,jajajjajaj,mis buenos amig@s siempre me dicen lo bueno y lo malo y yo les quiero un monton y ellos ami y nos decimos lo que nos tengamos que decir para eso somos amigo
ana, del uno al diez , un cien te doy
yo soy cabezona y cuando discuto con algun amig@ siempre me dicen,joder que cabezona, siempre igual,jajajjajaj,mis buenos amig@s siempre me dicen lo bueno y lo malo y yo les quiero un monton y ellos ami y nos decimos lo que nos tengamos que decir para eso somos amigo
ana, del uno al diez , un cien te doy
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Bea
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- Registrado: Lun Ene 30, 2006 1:01 pm
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#15
Anaxx, yo siempre digo que las cosas no son tanto lo que se dice sino cómo y a quien, y en este medio al no haber palabra dicha, no existe la entonacion ni el tono sarcastico, vamos la intencion con qué se dice, asi que sólo depende de la persona que lo lea y cómo lo quiera interpretar, ni mas ni menos.
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