Jeromín

[Jeromín]

Hola a tod@s,

Ha sido todo un hallazgo encontraros. Dicen que las penas compartidas son más llevaderas, así que me uno al grupo.

Soy uno más de los que se aburren yendo al médico, porque el médico no sabe ayudarte. Por lo que he podido ver, a cada uno le ha surgido el SII por una razón o por otra (a veces por combinación de varias). Una vez que la cosa se dispara, también parece ser que es bastante complicada de tratar.

En mi caso he tenido suerte. Después de más de 20 años con problemas y harto de que los médicos me dijeran que estaba perfectamente, que debían de ser mis nervios, y tras una última revisión en profundidad, me dije a mí mismo "No pueden ser los nervios. Paso temporadas nervioso, como todo el mundo, pero otras temporadas estoy tranquilo y el problema me persigue igualmente". Y entonces me dije "tiene que ser algo que como, y además algo que como todos los días".

Así que empecé quitandome la leche y funcionó. Parece ser que soy intolerante a la lactosa, problema con el que conviven dos de cada tres adultos de este planeta. Parece ser que de forma natural la enzima que desdobla la lactosa en monosacáridos se pierde con la edad de forma natural, salvo que en la dieta se incorpore buena cantidad de lácteos poco o nada fermentados. Así que perdí la enzima, prácticamente por completo, y cuando tomo leche o algún derivado lácteo sin fermentar... me cag.. en la leche, vamos y perdón por la broma.

De todas maneras mi sufrido intestino creo que ha quedado tocado para siempre. En caso de gastroenteritis familiar (ya me entendéis) la mía dura al menos una semana más. No puedo tomar naranjas ni mandarinas porque me sientan fatal (parece ser que puedo tener la vesícula tocada) y la fibra en general debo tomarla con moderación (el tránsito intestinal lo tengo bastante acelerado normalmente). Vamos que los problemas no se han quitado, pero estoy muchísimo mejor. Ni sabía ya lo que era pasar varios días enteros sin gases...

La incapacidad actual de tratamiento eficaz del problema se lo achaco a una profesión médica que en un 90% son bastante incompetentes para tratar la salud. El concepto de salud se ha pervertido de tal forma que, por ejemplo, si las pruebas médicas dicen que no te pasa nada, es que no te pasa nada. Los de medicina general no se meten en complicaciones y derivan a los especialistas, los cuales suelen ser auténticos memos en los campos que no les conciernen. Cuando el problema de salud trasciende varias especialidades, más vale que vayas preparando pasta para visitar la clínica Mayo o el Cedar-Sinai. Mercenarios de la salud les llamo yo. Creedme que conozco un montón de ellos por cuestiones familiares y se salvan muy muy poquitos. Es lo que hay, que le vamos a hacer.

En fin, muchos ánimos a tod@s y paciencia con esos intestinos incordiantes. Es importante tomárselo con humor.

Abrazos para ellos y besos para ellas.